Los que me conocen bien, saben que estas líneas que vais a leer durante los próximos minutos, han sido las más complicadas de toda mi trayectoria profesional al frente de MujerGlobal. Plasmar negro sobre blanco, la historia de cómo Sonia Gil llegó a convertirse en la responsable de un proyecto tan complejo y ambicioso como MujerGlobal, ha sido el ejercicio de introspección personal más complicado que he tenido que realizar en mucho tiempo. No quiero contaros nada sobre el envoltorio, sólo voy a intentar desnudar un poco mi mente para trasladaros la historia de cómo surgió todo esto.
Vamos por partes.
Me llamo Sonia, soy madrileña y la número 9 de 11 hermanos, 8 chicas y 3 chicos. Seguro que para mis padres no fue nada fácil sacar adelante una familia de 11 hijos, sobre todo en aquellos tiempos tan complicados, pero lo que sí os puedo asegurar es que me considero una persona muy afortunada por pertenecer a una familia tan numerosa.
Desde muy pequeña soñé con formar una familia y tener hijos, es lo que tiene crecer rodeada de niños. Primero vino el niño, luego la niña, y ahí me hubiera plantado, pero después de un divorcio y conocer a mi actual pareja, supe que el número aumentaría, y fue cuando vinieron los dos pequeños. Sí, no contáis mal, son 3 príncipes y una princesa. Ellos son el motor de mi vida.
Sé por experiencia los cambios que supone la maternidad, tanto físicos, como emocionales, e incluso profesionales como fue en mi caso. En ese momento preferí dedicarme a ellos y dejé mi carrera y mi trabajo como auxiliar de odontología. No fue nada fácil, pasé años entre pañales y biberones, pero fue lo que elegí y no lo cambiaría por nada del mundo.
A pesar de todo, nunca abandoné la ambición e ilusión por emprender nuevos proyectos que me ayudaran a crecer personal y profesionalmente. Y así fue como al poco tiempo de mi último embarazo, mi chico me animó a crear un blog, donde pudiera contar todas esas cosas que a las mujeres nos apasionan, nos motivan e interesan, y al mismo tiempo mitigar de algún modo ese estado de agobio y depresión que puede suponer todo el proceso de gestación y post-parto.
Lo cierto es que no me lo pensé demasiado, la ilusión por abordar un nuevo proyecto profesional, junto con la posibilidad de seguir disponiendo del tiempo necesario para cuidar de mis peques, me animó a “lanzarme a la piscina” sin el menor atisbo de duda. Además, siempre he sido una apasionada de la comunicación, y el blog me permitiría acercarme a una profesión por la que sentía verdadera admiración.
Así nació MujerGlobal, en abril de 2005. Algo que en un principio comenzó como una terapia personal, ha acabado convirtiéndose en un medio donde puedo expresar con total libertad mis opiniones, experiencias, y transmitir todos mis conocimientos. En ningún momento fui verdaderamente consciente del alcance y repercusión que todo esto podría tener, ni siquiera era uno de mis objetivos, pero a veces la vida te sobrepasa y no te queda más remedio que aceptar y adaptarte a lo que te pone sobre la mesa.
A partir de ahí, todo vino muy deprisa, tuve la oportunidad de acudir al primer evento blogger de belleza que se hizo en España de la mano de Lancôme, fui jurado de los premios L’Oréal de la MFSW durante dos años consecutivos, entrevisté al gran Antonio Banderas, y desde hace 4 años, algo que me hace especialmente feliz, colaboro con la AECC y Ausonia en la campaña contra el cáncer de mama. Podría rellenar hojas y hojas con experiencias que he podido vivir y con recortes de prensa en los que Mujerglobal ha aparecido, pero no quiero quedarme con algo tan superficial.
Como Sonia Gil y no como MujerGlobal, quiero quedarme con toda la formación que he adquirido y que sigo adquiriendo, con todo lo que he aprendido de vosotros, mis lectores, y que pienso seguir haciéndo, y con las personas que a lo largo de estos casi 10 años me he encontrado y que hoy forman parte de mi vida, y que, aunque no los voy a nombrar, ellos saben quién son y con eso me basta.
Si hay algo que MujerGlobal me ha enseñado, ha sido a crecer como mujer, madre, pareja y persona, sin abandonar mi ambición profesional, sin dejar de tener ilusión por emprender, aprender y mejorar en todos los aspectos de mi vida con total independencia y libertad.
A partir de este momento, me gustaría que MujerGlobal siguiera siendo un espacio sin cánones de belleza establecidos, que diera respuesta a mujeres y hombres reales, sin los clásicos estereotipos que nos venden en otros medios de comunicación, en los anuncios publicitarios o en las revistas de moda y tendencias. Siempre he tenido la firme convicción de que todos tenemos una belleza natural que nos hace únicos, a veces sólo es cuestión de creérnoslo un poquito y mostrar al exterior el verdadero encanto que todos llevamos en nuestro interior.
Sonia Gil