Oysho nos presenta esta temporada repleta de estampados, especialmente florales conbinados con prints animal, rayas o lunares.
La corsetería nos sorprende nos sorprende recuperando el bustier, la braguita alta o el body con encajes aplicaciones de pedrería o acabados de terciopelo.
En cuanto a los tonos, camel y marino, verde botella, gris topo y marrón se conbinan con detalles en piel como coderas o ribetes.
La pincelada de esta colección la ponen los complementos, horquillas lacadas con perlitas, diademas con flores de tul y foulards.
Me encanta Oysho. Cada año me sorprende más con sus nuevos diseños y su toque fresco que destaca sobre otras marcas. Sin duda, mi marca favorita.