Una limpieza a fondo es la mejor manera de dar la bienvenida al nuevo miembro de la familia. No la retrases mucho, se trata de una tarea que te llevará horas y supondrá un esfuerzo extra.
- Después de la limpieza a fondo, recuerda que el cuarto de baño y la cocina deben limpiarse todos los días y las habitaciones de forma regular.
- Hay que emplear detergentes en su cantidad justa y aclarar después las superficies.
- El polvo se elimina fácilmente con un paño humedecido con vinagre contra la cal.
- En casa se debe usar calzado diferente al que se usa para la calle.
- Recuerda que una buena ventilación es fundamental: mejor abrir ventanas que usar ambientadores.
El grado de humedad
Al encender la calefacción, el ambiente puede volverse muy seco, lo que provoca irritaciones en las vías respiratorias.
Utiliza un humidificador o un vaporizador.
El grado de humedad ambiental no debe tener más de un 60 o un 70% de humedad. Un exceso de humedad produce moho y ácaros en las alfombras, las cortinas y los colchones.
Factores contaminantes
El humo del tabaco. Irrita los bronquios y los ojos, retrasa el crecimiento y aumenta la posibilidad de sufrir infecciones producidas por virus y bacterias.
No fumes nunca en presencia del bebé ni dentro del coche con el niño. Las emanaciones de las cocinas y los aparatos de gas: hay que vigilar que no haya escapes de monóxido de carbono y óxido de nitrógeno. Es necesario someter las instalaciones a un correcto mantenimiento y a revisiones periódicas. Los productos químicos: productos de limpieza, colas, aislantes, pinturas…
Coloca al bebé lejos de aparatos eléctricos: frigorífico, televisor, despertador eléctrico, móviles…
Para mejorar la calidad del aire, es bueno tener algunas plantas: añaden al ambiente el oxígeno que producen.
Animales domésticos
La relación con los animales es muy positiva para un niño, pero hay que tener ciertos cuidados, ya que pueden transmitir enfermedades: toxoplasmosis, parasitosis, rabia y micosis.
- Llévalos al veterinario y someterles a las vacunaciones necesarias.
- Limpia todos los días las jaulas y los lugares donde duermen y desinféctalos una vez a la semana.
- No le acostumbres a que entren en los dormitorios y la cocina.
La contaminación acústica
Los sonidos superiores a los 90 decibelios pueden perjudicar las funciones auditivas de un bebé.
No escuches la radio ni la televisión a volumen muy elevado.
Acostumbra al niño al ajetreo de la casa, pero sin gritar o haciendo ruidos bruscos, que le puedan asustar.