Ha llegado la hora de dejar el biberón y pasar a los purés. ¿Pero a qué edad? ¿Qué ingredientes son fundamentales? La introducción de alimentos distintos a la leche, entre el cuarto y el sexto mes de vida, se denomina destete.
Un esquema a seguir
- A los 4 meses y medio: manzana y pera.
- A los 5 o 6 meses: verdura, aceite, cereales, plátano y carne.
- A partir de los 7 meses: quesos frescos, yogur y jamón de York.
- A partir de los 8 meses: yema de huevo, pescado, fruta excepto cítricos.
- A partir de los 9 meses: legumbres, tomates, cítricos.
- A partir de los 12 meses: leche de transición, huevo entero, sal y azúcar (con moderación).
Alimentos para introducir
Se deben introducir de manera gradual para comprobar las reacciones (eczemas o urticaria) o trastornos gastrointestinales (vómitos o diarrea).
Los que se introducen los últimos son los que pueden provocar alergias con mayor facilidad: el huevo, el tomate y los cítricos.
Las verduras
- Contienen vitaminas y sales minerales.
- Conviene escoger las de temporada a las tempranas.
- El primer puré de verduras puede contener patata, zanahoria, repollo o judías verdes y calabacín.
- Más adelante se le pueden añadir otras verduras, pero ni tomate, ni legumbres, que tienen mucha fibra. No se debe añadir sal o pastillas de caldo.
- Los productos pre-cocinados con verduras seleccionadas son de toda confianza, no tienen conservantes y pasan un riguroso control de calidad.
Los cereales
Los primeros no deben tener gluten: arroz, maíz y tapioca. Los encontrarás en tu híper bajo la forma de cremas o copos, y se añaden a la leche o a un caldo.
El aceite
Debe ser de oliva extra virgen y utilizarse en crudo.
La carne
El bebé puede comer cualquier tipo de carne. Debe hervirse o cocerse al vapor y después batirla o triturarla. Los productos infantiles con carnes pre-cocinadas y trituradas se digieren con facilidad y tienen todas las garantías.
El queso
Los tarritos destinados a los lactantes son productos apropiados, están esterilizados y son ricos en calcio y proteínas, y pobres en grasas.
Los purés preparados
Están bien equilibrados, son seguros y son muy prácticos para salir de viaje o durante las vacaciones.
La fruta
Debe ser fruta fresca en su punto óptimo de maduración, batida o rallada, sin piel, sin azúcar y sin limón. El bebé puede comerla antes o después de las comidas. Y ten en cuenta que los productos envasados son higiénicamente seguros, no tienen conservantes y están preparados con fruta seleccionada.
Cómo darle la papilla
- Darle el primer puré con una cucharita para que se familiarice con el nuevo objeto y aprenda a aceptarlo.
- Los alimentos sólidos se pueden ir introduciendo cuando no tenga mucha hambre porque podría no tener la suficiente paciencia como para esperar las pequeñas porciones.
- Hay que dejarle que toque la comida, la chupetee y que coja él la cuchara en la mano.
- Si rechaza el primer puré, es mejor no insistir y volver a proponérselo unos días más tarde, y si come poco sólido, conviene completar su alimentación con leche.
- Si el bebé escupe la papilla, pero sigue abriendo la boca, significa que le cuesta tragar. Basta con recoger con la cucharadita y volvérsela a dar hasta que se acostumbre. Pero si el rechazo es firme, se le puede dar la papilla en un biberón, haciendo más grande el agujero de la tetina.
- No hay que forzarle nunca a comer un alimento que no le guste.
El cubierto del bebé
No hace falta esterilizar la vajilla del bebé, basta con lavarla bien. Esto es lo imprescindible:
- Un plato irrompible que se pueda lavar en el lavavajillas.
- Cubiertos.
- Un vaso irrompible.
- Envases para conservar los purés en la nevera.
- Una batidora para triturar pequeñas cantidades de comida.