El principio de esta dieta disociada consiste en separarla en dos fases o etapas. En una primera etapa no podrás incorporar hidratos de carbono ni grasas. En la segunda etapa o fase de mantenimiento, excepto el azúcar refinado y las grasas, podrás incorporar de manera racional, todo tipo de alimentos.
Fase 1. Alimentos permitidos:
- Frutas:
Ingiérelos una hora antes de las comidas sin mezclar las ácidas con las dulces.
Elige cualquier fruta excepto banana, higo y uva. - Lácteos y quesos:
Elige los descremados y no agregues azúcar, sí edulcorante. - Verduras:
Todas están permitidas. - Huevos:
Dos veces a la semana, duros o pasados por agua. - Carnes blancas:
Puedes ingerir pollo, conejo, pavo y pescados blancos sin grasa. Todas cocidas sin piel ni grasa a la parrilla. - Cereales:
Sólo se permiten los integrales. - Bebidas:
Sí al agua mineral (mínimo de 2 a 3 litros) y a las infusiones sin azúcar.
Fase 2 o mantenimiento:
- Incorpora el resto de los alimentos en forma progresiva y moderada, excepto las grasas y azúcares.
- Si incorporas pan, harina y arroz, que sean siempre integrales.
- Si utilizas aceite elige el de oliva crudo.
- También puedes incorporar ocasionalmente una copa de vino.
Importante
Realiza esta dieta durante 1 mes y perderás con ella un promedio de entre uno y dos kilos por semana.
Siempre consulta con un especialista en nutrición antes de comenzar cualquier dieta.