Bajar y subir de peso muy rápido, por hacer dietas que han triunfado por su marketing, puede perjudicar y afectar al corazón, que es un músculo y necesita adaptarse a cualquier cambio.
Según Ata Pouramini, orientador en salud que además estudió Nutrición en la Oxford Brooks University, “hay que ir paso a paso: cuando se baja rápidamente de peso, la tensión arterial y pulsaciones, así como el ritmo cardíaco, tienen que cambiar, y si no se está en forma, se puede experimentar irregularidades cardíacas, y en casos extremos, si no se tiene mucho cuidado, se puede sufrir el llamado el efecto yoyó y padecer insuficiencia cardíaca”.
Hay varios peligros en este tipo de dietas milagro:
- Hay que evitar pasar hambre, porque si se empieza a bajar calorías por ese tipo de dietas extremas, se puede comprometer la integridad de los huesos, y eso puede llevar a tener osteoporosis prematura.
- Las chicas jóvenes y adolescentes pueden incluso perder la regla, lo que provoca cambios hormonales, otra cosa que conlleva el riesgo de sufrir osteoporosis prematura.
- Pueden alterar el metabolismo y reducirlo, haciendo que el cuerpo se haga más eficaz guardando calorías. Esta forma de perder peso, se llama el hambriento, y es peligrosa porque el cuerpo no recibe los nutrientes esenciales para mantenerse. Esta carencia puede generar debilidad en las defensas, disminuir la capacidad mental, y en casos extremos, como la anorexia, conducir a la muerte.
Ata Pouramini ha hecho una lista con catorce comidas que pueden ayudar a perder peso de una forma sana y sin hacer dietas:
- Los chiles picantes y rojos, son una forma natural de suprimir el apetito. El ingrediente mágico es la capsaicina.
- Cereales con alto contenido en fibra. Comer cereales con altos niveles de fibra te llena más rápido y hará que pares de comer.
- Las nueces. Por supuesto, crudas, porque mantienen mejor sus beneficios. Aunque tienen mucha grasa, son grasas beneficiosas, con omega-3. La gente que pica con nueces suele estar más delgados que la gente que pica comida basura.
- El vinagre. Tiene un efecto saciante para el estómago. El ácido en el vinagre reduce el tiempo que la comida pasa desde el estómago hasta los intestinos, así te sientes más lleno.
- Dos huevos por la mañana te pueden hacer sentir mucho más lleno que comer un par de donuts. Los dos tienen las mismas calorías. La razón es que la proteína y la grasa evitará picos en niveles de azúcares en la sangre, que te pueden provocar querer comer más.
- La colecistoquinina, presente en los frijoles, esta es la sustancia que puede ser tu mejor amiga para perder peso de una forma sana. Es una hormona natural que suprime el apetito. Un estudio en la Universidad de California demostró que comiendo frijoles se tenía más de esta hormona en sangre, que comiendo arroz, por ejemplo. También los frijoles mantienen el azúcar en la sangre de una forma constante, sin picos.
- Té verde. Su antioxidante, la catechina, ayuda a incrementar el metabolismo y quemar grasa.
- Las peras. Tienen más fibra que las manzanas. La fibra se llama pectina, y baja los niveles de azúcar en sangre. Un estudio en Brasil, realizado durante tres meses con mujeres obesas, demostró que comer tres peras pequeñas al día hacía perder a las mujeres más peso que a otras que comían una barra de muesli con las mismas calorías.
- Ensalada verde y grande como primer plato. Te saciará y evitará que comas platos más calóricos.
- Toma una sopa. Tu cerebro percibe la sopa como un alimento que llena, y no suele tener muchas calorías.
- El aceite de oliva. Puede mejorar tu metabolismo. De hecho, un estudio en Australia demostró que poner aceite de oliva sobre el muesli mejora el metabolismo, más que bañarlos en leche desnatada.
- Pomelo. Un estudio realizado en 2006 con 91 personas obesas internas en un centro de investigación, demostró que añadir medio pomelo a la dieta o beber su zumo tres veces al día, ayuda a perder peso. La razón es que el pomelo tiene un ingrediente que baja los niveles de insulina, lo que puede ayudar a tu cuerpo a convertir calorías en energía.
- La canela. Un poco de canela sobre la comida puede evitar que te sientas hambriento. La mitad de una cucharilla de canela también puede bajar los azúcares en la sangre, colesterol y triglicéridos en la gente con diabetes tipo 2, según los investigadores del Departamento de Agricultura de EEUU.
- Pescado y carne de res. El aminoácido leucina que también es abundante en el pescado, puede ayudar a perder grasa. Te quita el hambre, y también, según un estudio, mujeres que comían 200 gramos -unas 1.700 calorías- de pescado al día, perdían más grasa, que mujeres comiendo 1.700 calorías de otro tipo de comida sin proteína.
Yo nunca me he puesto a dieta porque hago ejercicio todo el año.