Disneyland París, es el viaje con el que todos alguna vez hemos soñado. Da lo mismo, grandes o pequeños, todos disfrutamos de este lugar tan mágico, donde los sueños siempre se hacen realidad.
Mi sueño se hizo realidad hace unos meses, cuando por el cumpleaños de uno de los peques, decidimos viajar al parque, para darles la sorpresa.
La verdad, he viajado bastantes veces a París, muchas de ellas por trabajo, pero aún no había tenido la oportunidad de conocer Disneyland París y esta, me parecía la ocasión perfecta, para disfrutar del parque en familia.
Nosotros viajamos a París desde el día 11 de octubre martes, y víspera de fiesta en España, hasta el Domingo día 16. Al ser más días, queríamos aprovechar también nuestra visita, para llevar a los peques a conocer París, por eso barajamos la posibilidad de hospedarnos en la ciudad, pero al final, nos decidimos por un hotel cerca del parque.
Elegimos el Hotel Explorers, porque está a 5 minutos en coche del parque, y su decoración está muy ambientada a los niños. Pero la verdad, aunque el Hotel es chulo, me decepcionó bastante con el tamaño de las habitaciones (contratamos la familiar), y con la calidad del buffet. Para la próxima, tengo claro que me hospedaré, en uno de los hoteles de dentro del parque, que son una maravilla.
Las entradas al parque, mejor cogerlas en la página web de Disney, nosotros las teníamos para los días 12 y 13 y no pudimos elegir mejores fechas. No hacía mucho frio, tuvimos sol y el parque no estaba masificado. Lo disfrutamos muchísimo y sin hacer colas.
El primer día con muchísima ilusión y después de pasar toda la seguridad, que hay en la entrada principal del parque, decidimos empezar por Disneyland Park.
Desde que te adentras en el parque, es como si vivieras dentro de un cuento, esos que tanto leíamos de pequeñas, la magia está en todos los rincones, en Disneyland París
Es muy fácil volver a ser un niño, aunque te lo hayas imaginado muchas veces, la realidad, es mucho más sorprendente.
Disneyland París es bastante grande, pero si os organizáis bien, podéis visitarlo todo. Además, tenéis, el fastpass, un servicio gratuito de acceso rápido, para algunas atracciones, que sirve para los dos parques y con el que evitareis las colas, y así podréis sacar el máximo partido a vuestra visita. Yo en las fechas en las que viajamos, no tuve que utilizarlo, porque las esperas no superaban los 10 minutos.
Pero, si, aun así, hacéis una visita fugaz, os voy a decir cuáles fueron las atracciones con las que más disfrutamos, para que no os vayáis sin verlas.
No os podéis perder, Piratas del Caribe una atracción donde podréis disfrutar de la vida pirata en un paseo en barca. Buzz Lightyear Laser Blast, una de las favoritas de los peques. En ella, todos podemos interactuar con pistolas laser, para ayudar a Buzz a derrotar a Zurg.
Phanton Manor, que es la atracción, donde os adentrareis en una mansión, para tener una experiencia terrorífica. Tranquilos, no da mucho miedo ya que se puede entrar con los peques y ellos se lo pasaron genial.
Disney and Pixar Short Film Festival, pasar y acomodaros al Discoveryland Theatre, donde escuchareis a John Lasseter, director creativo del Pixar and Walt Disney Animation Studios, quien os enseñará el proceso de cómo cobran vida, los personajes de Disney. Además, veréis 3 cortos, con efectos especiales dentro de la sala. A nosotros nos encantó.
Pero sin duda nuestra atracción favorita es, it’s a small world, un viaje en barca alrededor de todo el mundo, donde muñecas vestidas de forma tradicional, de todos los lugares del mundo, cantan y bailan, en un escenario impresionante, decorado con papel maché, purpurina y telas. Realmente maravilloso.
Y por supuesto no perderos la cabalgata final con todos los personajes de Disney y el espectáculo en el Castillo de la Bella Durmiente (Sleeping Beauty Castle), un cuento de hadas hecho realidad. Aun me acuerdo de como se les iluminaban las caritas a los peques.
El día 13 lo dedicamos al Parque Walt Disney Studios. Este parque me sorprendió muchísimo, es más pequeño que Disneyland Park, pero a nosotros, igualmente nos encantó.
En Walt Disney Studios podéis disfrutar además de algunas atracciones, como la de Ratatouille, que no os podéis perder, Art of Disney Animation, donde veréis como se crea la magia y los clásicos de Disney, y también de momentos llenos de emoción, con las míticas escenas del Toon Studio y los alucinantes efectos de Blacklot.
Un detalle que os interesará saber, es que tanto a Disneyland Park como a Walt Disney Studios podéis pasar comida, detalle que se agradece mucho, para meter un piscolabis para los peques. Pero si no queréis ir cargados, dentro del parque, hay restaurantes tipo burger, con menús muy ricos y asequibles, donde viene genial hacer una paradita.
Y, por último, no os olvidéis de las tiendas Disney, son espectaculares, los precios son bastante normales y hay muchos productos en oferta. Tenéis tiendas Disney, dentro del parque y en Disney Village que está fuera del parque, y es una zona de restauración, ocio y tiendas, que está fenomenal para ir después de que cierran el parque.
Nosotros volvimos el 14 para celebrar el cumple del peque en el Rainforest Café, que nos habían hablado genial de él.
El Rainforest café, es un restaurante con tienda, que simula la selva de la Amazonia, y donde puedes cenar, en compañía de animales, que se mueven y emiten sonidos. Pero cuidado, no os asustéis, porque durante la cena, las luces se apagan y da comienzo una tormenta tropical. Es una pasada. Visita obligada, en el Rainforest Café se come fenomenal y es una experiencia que nos os podéis perder.
Y con el cumpleaños del peque terminó nuestra experiencia en Disneyland París. Os recomiendo a todos que vayáis, yo estoy deseando volver. Es un lugar mágico y sin duda en Disneyland París los sueños se hacen realidad. ¡No dejéis de soñar!!
Seguro que la visita es genial, divertida y emocionante. Bonitas fotos¡¡¡¡