Leche limpiadora
Una taza de leche y un pepino mediano. Licuamos el pepino y lo mezclamos con la leche. Aplicamos en el cutis con un algodoncillo, dejamos unos minutos y después aclaramos con abundante agua tibia.
Leche de tomillo
Calienta al baño María una cucharada sopera de leche con una de harina de trigo y otra de maíz, cuando la mezcla espese, añade dos cucharadas de infusión de tomillo. Batir y mezclar bien los ingredientes.
Dejar enfriar antes de aplicar, al igual que la otra leche limpiadora, aplicamos de la misma manera, dejamos actuar unos minutos y aclaramos con abundante agua tibia.
Esta leche limpiadora viene muy bien para el cutis graso.