Ayer jueves terminaba la parte dedicada a los diseñadores consagrados.
Tras una intensa jornada en Cibeles, donde se presentaron doce colecciones -algunas interesantes-, la primera parte de Cibeles Madrid Fashion Week, dedicada a los diseñadores consagrados, ha llegado a su fin, ya que hoy el protagonista será El Ego y los nuevos creadores. Esto fue lo que brilló estos días en la plataforma de moda madrileña:
Los zapatos. Diseñados en su mayoría por los propios diseñadores, fueren el elemento más logrado de todos los complementos que pasaron por la pasarela. Aunque se vieron algunos planos, reinaron los de tacón interminable y plataforma -en casos, doble-. En prácticamente todos los desfiles fueron perfectos.
El beige, el plata y los dorados. Sin duda los tonos dorados, el beige, los arena y los carne fueron los colores estrella del fondo de armario. Para la noche, se añaden los dorados, corales y platas para aportar un toque de sofisticación y fiesta.
Vestidos: Minivestidos, maxi vestidos pero, sobre todo, por encima de la rodilla y con escotes enriquecidos con aplicaciones y lazadas. Son la prenda fundamental en el vestuario femenino. Es el triunfo de la femineidad frente al corte andrógino de otras temporadas.
Volúmenes: Llegan para faldas, vestidos, blusas y pantalones en forma de abullonados, volantes, plisados, frunces, conseguidos mediante sobrefaldas o con elaborados juegos de gasas.
El mono. Amplio y cómodo, se sitúa muy por encima del pantalón que continúa sin recuperar su lugar en el podio, aunque se va acercando. Los que aparecen son pitillo total, tipo malla, o muy anchos y con predominio de los de tiros muy largos de inspiración hindú.zos, grandes flores y estampados de leopardo o plumas. Esta firma ha introducido como novedad un raso elástico con licra.
Pequeños recogidos: Se acabaron los grandes cardados y moños. El volumen que la próxima temporada adoptarán las faldas se contrapone a las tendencias de cabello. La mayoría de los modelos lució pequeños moños y cabello retirado de la cara.
